jueves, enero 06, 2011

Ilusiones y Fantasías

Con una ilusión que le hacía brillar los ojos, sosteniendo con la zurda la taza de café y con su derecha los dedos delicados que tanto le gustaban de esa mano tan suave, la miraba como niño ansioso y le preguntaba… “Y si el mundo se detuviera ya y quedáramos solos vos y yo en este instante tan único. Y si vos sostuvieras mi mano y me juraras amor eterno. Quizá entonces colapsaran todas las estructuras sociales y el planeta de una vez por todas nos daría el espacio que merecemos para amarnos en paz.

Ella, compartiendo la misma ilusión pero de una manera muy suya, le miraba con amor, queriendo viajar con él en ese viaje de ensueño.